Share this page:  
 

Multilingual Scriptures

(Compare books in 2 different language versions of your choice)

Comparison Search:

Select Language version and font:
You can only select max. of two versions.
Book:
Chapter:
Verse:
---------
From: To:

Free Search:

Select Language version and font:
Enter search text:

Multilingual Scriptures Home » Spanish Sag. Escrituras 1569 » 1 Thessalonians

Spanish Sag. Escrituras 1569
Chapter # Verse # Verse Detail
11¶ Pablo, y Silvano, y Timoteo, a la Iglesia de los tesalonicenses congregada en Dios, el Padre, y en el Señor Jesús el Cristo: Gracia y paz tengáis de Dios nuestro Padre y del Señor Jesús, el Cristo.
12¶ Damos siempre gracias a Dios por todos vosotros, haciendo memoria de vosotros en nuestras oraciones;
13sin cesar acordándonos de la obra de vuestra fe, y del trabajo y caridad, y del esperar con la esperanza del Señor nuestro, Jesús, el Cristo, delante del Dios y Padre nuestro.
14Estando ciertos, hermanos amados, de que sois escogidos de Dios.
15Por cuanto nuestro Evangelio no fue entre vosotros en palabra solamente, mas también en potencia, y en el Espíritu Santo, y en gran plenitud; como sabéis cuáles fuimos entre vosotros por causa de vosotros.
16¶ Y vosotros fuisteis hechos imitadores de nosotros, y del Señor, recibiendo la palabra con mucha tribulación, con gozo del Espíritu Santo;
17de tal manera que habéis sido ejemplo a todos los que han creído en Macedonia y en Acaya.
18Porque por vosotros ha sido divulgada la Palabra del Señor no sólo en Macedonia y en Acaya, mas aun en todo lugar vuestra fe, que es en Dios, se ha extendido; de tal manera que no tenemos necesidad de hablar nada.
19Porque ellos cuentan de nosotros cuál entrada tuvimos a vosotros; y de qué manera fuisteis convertidos a Dios dejando los ídolos para servir al Dios vivo y verdadero.
110Y esperar a su Hijo de los cielos, al cual resucitó de los muertos: a Jesús, el cual nos libró de la ira que ha de venir.
21¶ Porque, hermanos, vosotros mismos sabéis que nuestra entrada a vosotros no fue vana,
22pues aun habiendo padecido antes, y sido afrentados en Filipos, como sabéis, tuvimos denuedo en nuestro Dios para anunciaros el Evangelio de Dios con mucha diligencia.
23Porque nuestra exhortación no fue de error, ni de inmundicia, ni por engaño;
24sino por haber sido aprobados de Dios para que se nos encargase el Evangelio, así hablamos; no como los que agradan a los hombres, sino a Dios, el cual prueba nuestros corazones.
25Porque nunca fuimos lisonjeros en la palabra, como sabéis, ni tocados de avaricia; Dios es testigo;
26ni buscamos de los hombres gloria, ni de vosotros, ni de otros, aunque podíamos seros carga como apóstoles de Cristo.
27¶ Antes fuimos blandos entre vosotros como la que cría, que regala a sus hijos.
28Tan amadores de vosotros, que quisiéramos entregaros no sólo el Evangelio de Dios, sino aun nuestras propias almas; porque nos sois carísimos.
29Porque ya, hermanos, os acordáis de nuestro trabajo y fatiga; que trabajando de noche y de día por no ser gravosos a ninguno de vosotros, predicamos entre vosotros el Evangelio de Dios.
210Vosotros sois testigos, y Dios, de cuán santa y justa e irreprensiblemente nos condujimos con vosotros que creisteis;
211así como sabéis de qué modo exhortábamos y consolábamos a cada uno de vosotros, como el padre a sus hijos,
212y os encargábamos que anduvieseis como es digno de Dios, que os llamó a su Reino y gloria.
213¶ Por lo cual, también nosotros damos gracias a Dios sin cesar, de que habiendo recibido de nosotros la palabra para oír de Dios, la recibisteis no como palabra de hombres, sino (como a la verdad lo es) como palabra de Dios, la cual obra en vosotros los que creisteis.
214Porque vosotros, hermanos, habéis sido imitadores en Cristo Jesús de las Iglesias de Dios que están en Judea; que habéis padecido también vosotros las mismas cosas de los de vuestra propia nación, como también ellos de los judíos;
215los cuales también mataron al Señor Jesús y a sus propios profetas, y a nosotros nos han perseguido; y no agradan a Dios, y se oponen a todos los hombres;
216prohibiéndonos hablar a los gentiles, a fin de que se salven, para llenar la medida de sus pecados siempre, porque la ira (de Dios) los ha alcanzado hasta el extremo.
217¶ Mas nosotros, hermanos, privados de vosotros por un poco de tiempo, de vista, no de corazón, tanto más procuramos con mucho deseo ver vuestro rostro.
218Por lo cual quisimos ir a vosotros, yo Pablo a la verdad, una y otra vez; pero Satanás nos estorbó.
219Porque ¿cuál es nuestra esperanza, o gozo, o corona de que me gloríe? ¿No lo sois vosotros, delante del Señor nuestro Jesús el Cristo en su venida?
220Que vosotros sois nuestra gloria y gozo.
31¶ Por lo cual, no pudiendo esperar más, acordamos quedarnos solos en Atenas,
32y enviamos a Timoteo, nuestro hermano, y ministro de Dios, y colaborador nuestro en el Evangelio del Cristo, a confirmaros y exhortaros en vuestra fe,
33para que nadie se mueva en estas tribulaciones; porque vosotros sabéis que nosotros somos puestos para esto.
34Que aun estando con vosotros, os predecíamos que habíamos de pasar tribulaciones, como ha acontecido y lo sabéis.
35Por lo cual, también yo, no esperando más, he enviado a reconocer vuestra fe, no sea que os haya tentado el Tentador, y que nuestro trabajo haya sido en vano.
36¶ Pero volviendo de vosotros a nosotros Timoteo, y haciéndonos saber buenas noticias de vuestra fe y caridad, y que siempre tenéis buena memoria de nosotros, deseando vernos, como también nosotros a vosotros.
37En ello, hermanos, recibimos consolación de vosotros en toda nuestra tribulación y necesidad por causa de vuestra fe;
38porque ahora vivimos nosotros , si vosotros estáis firmes en el Señor.
39Por lo cual, ¿qué acción de gracias podremos dar a Dios por vosotros, por todo el gozo con que nos gozamos a causa de vosotros delante de nuestro Dios,
310orando de noche y de día con grande instancia, que veamos vuestro rostro, y que cumplamos lo que falta a vuestra fe?
311¶ Mas el mismo Dios y Padre nuestro, y el Señor nuestro Jesús, el Cristo, encamine nuestro viaje a vosotros.
312Y a vosotros multiplique el Señor, y haga abundar la caridad entre vosotros, y para con todos, como es también de nosotros para con vosotros;
313para que sean confirmados vuestros corazones en santidad, irreprensibles delante del Dios y Padre nuestro, para la venida del Señor nuestro Jesús, el Cristo, con todos sus santos.
41¶ Resta pues, hermanos, que os roguemos y exhortemos en el Señor Jesús, que de la manera que fuisteis enseñados de nosotros de cómo os conviene andar, y agradar a Dios, así vayáis creciendo.
42Porque ya sabéis qué mandamientos os dimos por el Señor Jesús.
43Porque la voluntad de Dios es vuestra santificación; que os apartéis de fornicación;
44que cada uno de vosotros sepa tener su vaso en santificación y honestidad;
45no con afecto de concupiscencia, como los gentiles que no conocen a Dios:
46que ninguno oprima, ni calumnie en nada a su hermano; porque el Señor es vengador de todo esto, como ya os hemos dicho y protestado.
47Porque no nos ha llamado Dios a inmundicia, sino a santificación.
48Así que, el que nos menosprecia, no menosprecia a hombre, sino a Dios, el cual también nos dio su Espíritu Santo.
49¶ Mas acerca del amor entre los hermanos no tenéis necesidad que os escriba, porque vosotros mismos habéis aprendido de Dios que os mostréis caridad los unos a los otros;
410y también lo hacéis así con todos los hermanos que están por toda Macedonia. Pero os rogamos, hermanos, que vayáis creciendo;
411y que procuréis tener quietud, y hacer vuestros negocios, y que obréis con vuestras manos de la manera que os hemos mandado;
412y que andéis honestamente para con los extraños, y que nada de ninguno deseéis.
413¶ Tampoco, hermanos, queremos que ignoréis acerca de los que duermen. Que no os entristezcáis como los otros que no tienen esperanza.
414Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también traerá Dios con él a los que durmieron en Jesús.
415Por lo cual, os decimos esto en Palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que quedamos hasta la venida del Señor, no seremos delanteros a los que durmieron.
416Porque el mismo Señor con aclamación, con voz de Arcángel y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en el Cristo resucitarán primero;
417luego nosotros, los que vivimos, los que quedamos, y juntamente con ellos seremos arrebatados en las nubes a recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.
418Por tanto, consolaos los unos a los otros en estas palabras.
51¶ Pero acerca de los tiempos y de los momentos, no tenéis, hermanos, necesidad de que yo os escriba,
52porque vosotros sabéis bien, que el día del Señor vendrá como ladrón de noche,
53que cuando dirán: Paz y seguridad, entonces vendrá sobre ellos destrucción de repente, como los dolores a la mujer encinta; y no escaparán.
54Mas vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas, para que aquel día os tome como ladrón;
55porque todos vosotros sois hijos de la luz, e hijos del día; no somos de la noche, ni de las tinieblas.
56¶ Por tanto, no durmamos como los demás; antes velemos y seamos sobrios.
57Porque los que duermen, de noche duermen; y los que están borrachos, de noche están borrachos.
58Mas nosotros, que somos hijos del día, estemos sobrios, vestidos de cota de fe y de caridad, y la esperanza de la salud por yelmo.
59Porque no nos ha ordenado Dios para ira, sino para alcanzar salud por el Señor nuestro Jesús el Cristo,
510el cual murió por nosotros, para que sea que velemos, o que durmamos, vivamos juntamente con él.
511¶ Por lo cual, consolaos y edificaos los unos a los otros, así como lo hacéis.
512Y os rogamos, hermanos, que reconozcáis a los que trabajan entre vosotros, y os presiden en el Señor, y os amonestan;
513y que los tengáis en mayor caridad por amor de su obra. Tened paz los unos con los otros.
514También os rogamos, hermanos, que amonestéis a los que andan desordenadamente, que consoléis a los de poco ánimo, que soportéis a los flacos, que seáis sufridos para con todos.
515Mirad que ninguno dé a otro mal por mal; antes seguid lo bueno siempre los unos para con los otros, y para con todos.
516¶ Estad siempre gozosos.
517Orad sin cesar.
518Dad gracias en todo; porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.
519No apaguéis el Espíritu.
520No menospreciéis las profecías.
521Examinadlo todo; retened lo que fuere bueno.
522Apartaos de toda apariencia de mal.
523¶ Y el Dios de paz os santifique completamente; para que vuestro espíritu, alma y cuerpo sea guardado entero sin reprensión para la venida del Señor nuestro, Jesús, el Cristo.
524Fiel es el que os ha llamado; el cual también lo hará.
525Hermanos, orad por nosotros.
526Saludad a todos los hermanos con ósculo santo.
527Os amonesto por el Señor, que esta carta sea leída a todos los santos hermanos.
528La gracia del Señor nuestro Jesús, el Cristo, sea con vosotros. Amén.